El que habita al abrigo de Dios,
Morará bajo sombras de amor;
Sobre él no vendrá ningún mal
Y en sus alas felíz vivirá.

Oh, yo quiero hábitar al abrigo de Dios,
Sólo allí encontraré paz y profundo amor;
Mi delicia es con él, comunión disfrutar,
Y por siempre su nombre alabar.

El que hábita al abrigo de Dios
Ciertamente muy felíz será,
Ángeles guardarán su salud
Y sus pies nunca resbalarán.

Oh, yo quiero hábitar al abrigo de Dios,
Sólo allí encontraré paz y profundo amor;
Mi delicia es con él, comunión disfrutar,
Y por siempre su nombre alabar.

Descarga las partituras para piano y voz aquí - PDF